Runa Rea

Defecar encuclillas*. El inodoro es uno de esos inventos que nos ha hecho ganar en higiene pero nos ha hecho perder la postura correcta; lo cierto es que sentarse en la tasa del váter puede provocar una comprensión de las venas de las piernas y aumentar el riesgo de padecer várices, tanto en las piernas como en le ano y el recto. La posición en cuclillas es el método tradicional para defecar y las personas de las sociedades poco desarrolladas aun la utilizan en su mayoría.

Párese ser que en esta postura la tensión a la que se someten los muslos ejerce una acción positiva sobre la expulsión de las heces, especialmente cuando padecemos estreñimiento. En la década de 1980 el doctor ruso Sikirov estudio a 20 pacientes que sufrían hemorroides y les aconsejo que cambiaran los hábitos de defecación en dos formas: que esperan a defecar, que se aguantaran hasta que tuvieran muchas ganas, y que lo hicieran de cuclillas. De dieciocho pacientes, 18 tuvieron una reducción parcial o total de los síntomas en pocos días o en los casos mas rebeldes en pocos meses. Los dos pacientes que no mejoraron con esta posición habían sido operados previamente. Según el doctor Sikirov, tanto la posición en cuclillas como el numero de defecaciones pueden pueden influir en le desarrollo de este problema. A todo ello se une que cuándo se defeca de cuclillas se hace mucho mas rápidamente, las estadísticas nos dicen también que el tiempo medio de defecación es de tan solo un minuto cuando lo hacemos de cuclillas, mientras que si se utiliza la tasa el tiempo aumenta hasta de cuatro a quince minutos; hay personas que tardan media hora ó mas.