jueves, diciembre 28, 2006

Perder kilos podría evitar el cáncer de próstata

Una investigación norteamericana mostró que el descenso de peso en hombres está ligado a la prevención de tumores prostáticos. Los expertos dicen que el 30% de estos cánceres está relacionado con la obesidad

Por lo general, la mayoría de las afecciones, cualquiera sea el punto particular del organismo al que van dirigidas, son multicausales. Esto quiere decir que hay diversos agentes que influyen en su aparición y desarrollo.

El cáncer no escapa a esta categorización pues, más allá de la información genética, la suma de factores de riesgo, entre los que se encuentran la el sobrepeso y el estrés, cumple un rol fundamental a la hora de evaluar el avance de esta condición.

Más aún, de acuerdo con un equipo de investigadores de la Sociedad Americana del Cáncer (ACS según sus siglas en inglés) y el Centro de Próstata de la Universidad Duke, el descenso de peso y la realización de una dieta controlada podrían ayudar a evitar la aparición del cáncer de próstata.

Luego de analizar la situación de 70 mil hombres en el lapso comprendido entre 1982 y 1992, los científicos determinaron que los hombres cuyo peso se redujo cinco kilos o más presentaron menos posibilidades de padecer cáncer de próstata en comparación con sus pares que mantuvieron su peso o engordaron.

Consultado por Pro-Salud News, el doctor Mario Bruno, médico oncólogo, jefe del Servicio de Oncología del Hospital Álvarez indicó que “aún no está totalmente claro el papel del aumento o descenso de peso en la incidencia del cáncer de próstata pues, hasta el momento, el factor fundamental es la acción de la hormona masculina – testosterona – sobre el tejido prostático. No obstante, dado que ésta tiene compuestos grasos, uno podría pensar que un obeso tiene más carga hormonal y por lo tanto mayor riesgo. Esta hipótesis está sostenida por la Sociedad Americana del Cáncer que afirma que el 30 por ciento de los tumores de próstata están relacionados con la obesidad aunque continúan investigando en qué medida”.

Por su parte, el doctor César Blajman, médico especialista en oncología, jefe del Servicio de Oncología del Hospital J. Iturraspe de la Provincia de Santa Fe, postuló: “La dieta es uno de los llamados ‘factores ambientales’ que deben ser tenidos en cuenta en el cáncer. Pero aún no está claro cuáles son los alimentos que habría que evitar o cuál es la mejor dieta. Sin embargo, se sabe que los regímenes basados en alimentos ricos en hidratos de carbono o grasas no son los más recomendables”.

En este sentido, de acuerdo con el doctor Bruno y tal como sucede en otras afecciones, “bajar de peso ayuda, colabora y permite contar con un factor de riesgo menos; pero el sobrepeso no es un agente directamente relacionado con el cáncer de próstata pues si bien adelgazar puede contribuir a disminuir la incidencia en un pequeño porcentaje, la aparición de la enfermedad obedece a otras causas principales”.

“Sobre el tema de la dieta, lo destacable es que dado que el cáncer de próstata no se desarrolla de un día para el otro y desde el momento del primer indicio (tumor intraepitelial), hasta la aparición de cuadro en sí, pueden pasar hasta 30 años es fundamental cuidar la dieta para retrasar el inicio de la enfermedad o atenuar su avance”, detalló el doctor Blajman.

Datos del estudio

Según los resultados de la investigación que forman parte de la reciente edición de la publicación Cancer Epidemiology, Biomakers & Prevention, los hombres que lograron bajar más de cinco kilos a lo largo de la experiencia, presentaron 42 por ciento menos posibilidades de desarrollar cáncer de próstata.

En cuanto a los que no pudieron eliminar los kilitos de más, no fue posible determinar si ése fue un factor fundamental para el desarrollo y avance de la enfermedad o si sólo se trató de uno más.

“Es un hecho que los pacientes obesos que además tienen cáncer de próstata, presentan, por lo general, estadíos más avanzados de la enfermedad. Incluso, es mucho más difícil llevar adelante tratamientos quirúrgicos, por ejemplo. El punto de la cuestión es que determinadas dieta provocan alteraciones genómicas que hacen que las enzimas no trabajen y las células cancerosas se desarrollen más rápidamente”, concluyó el doctor Blajman.


infobae.com

miércoles, diciembre 27, 2006

Las placentas de todas las mujeres españolas embarazadas contienen pesticidas

Las placentas de todas las mujeres españolas embarazadas están contaminadas por uno o varios pesticidas, según un reciente estudio de la Universidad de Granada desarrollado por María José López. Tan escalofriante dato se agrava al saber que la media por placenta es de ¡ocho sustancias contaminantes organocloradas! que pueden provocar el nacimiento de bebés con malformaciones, especialmente en el aparato genitourinario. Y se trata de pesticidas que proceden ¡de la comida, el agua y el aire! Para llegar a tan increíble conclusión la investigadora española analizó muestras de 668 placentas buscando 17 posibles productos tóxicos. Y se encontró con que algunas mujeres llegaban a acumular hasta 15 de esas sustancias en sus placentas (siendo las más habituales DDE, lindano, endosulfán-diol y endosulfán-I).
En Discovery DSALUD hemos denunciado numerosas veces la gigantesca y lamentable contaminación a la que estamos siendo sometidos en las últimas décadas ante la indiferencia general solo que ahora la situación se ha agravado de tal manera que la probabilidad de que nuestros futuros descendientes nazcan con graves problemas de salud e, incluso, con deformidades, aumenta ya día a día. ¿Cuándo van a exigir las autoridades a las empresas que fabrican productos que contienen sustancias químicas tóxicas que las retiren de inmediato o demuestren su inocuidad? Porque el tiempo de espera se ha acabado (vea en nuestra web los tres artículos que sobre este preocupante asunto publicamos en los números 58, 59 y 63 de la revista).


http://www.dsalud.com/noticias_87_14.htm

Las bebidas de cola favorecen la osteoporosis

Las bebidas de cola -independientemente de que contengan o no cafeína- pueden causar osteoporosis al reducir la densidad ósea en las caderas de las mujeres de cierta edad aunque no se ha constatado que ocurra así en el caso de los varones. Los hombres estudiados consumieron de media cinco latas o botellas a la semana y cuatro en el caso de las mujeres. También se constató que la reducción de la densidad ósea no parecía deberse al gas de las bebidas ni, como algunos estudios anteriores sugerían, a que se reemplazara la leche por las colas ya que el consumo de ésta no se redujo. El estudio lo ha llevado a cabo Katherine Tucker en el Centro de Investigación de Nutrición de la Universidad de Tufts (Massachusetts, EEUU) y acaba de publicarse en American Journal of Clinical Nutrition. Lo que al parecer esta investigadora no ha tenido en cuenta es que también se achaca al consumo de leche de vaca la aparición de osteoporosis.

http://www.dsalud.com/noticias_88_08.htm

La leche de las madres fumadoras huele a nicotina

La leche de las madres que fuman huele a nicotina, según asegura un estudio que intenta explicar por qué los hijos de fumadoras tienen mayor propensión a fumar. La investigación, publicada en la revista científica New England Journal of Medicine, estudió las muestras de leche materna de cinco voluntarias antes y 20 minutos después de haber fumado uno o dos cigarrillos.
Un grupo de expertos confirmó que entre 30 y 60 minutos después de fumar la leche materna tenía un "un olor más fuerte" o "más parecido al de los cigarrillos". Estudios anteriores habían demostrado que los niveles de nicotina de la leche materna eran más altos 30 minutos después de fumar y que bajan gradualmente a las varias horas. Según el estudio, "ello puede ser la causa de que los niños expuestos encuentren atractivos esos sabores posteriormente en su vida".


http://www.dsalud.com/noticias_01_06.htm