Además, las personas que no fuman pero inhalan humo ajeno experimentan un aumento del 30 por ciento de su riesgo de enfermedad coronaria, advirtió el informe, que será analizado durante el encuentro que se desarrollará en Buenos Aires hasta el próximo miércoles, con la participación de más de 10.000 profesionales.
“Sabemos que tan sólo 30 minutos de exposición al humo de tabaco de segunda mano es suficiente para observar un cambio en la función de las arterias de los no fumadores” , sostuvo Joaquín Barnoya, director de investigación de la Unidad de Cirugía Cardiovascular de Guatemala y profesor de la Universidad Washington en St. Louis (EE.UU.).
En este sentido, el autor del estudio aseguró que el “humo de tabaco de segunda mano produce un daño directo al endotelio, que es la pared interna de las arterias, responsable de la dilatación y la contracción de las mismas”.
El informe también confirmó la presencia de ciertas sustancias en humo de tabaco con efecto “pernicioso” para las arterias, entre ellas, metales pesados, como el benceno o la acroleína.
“Estas sustancias causan un daño de oxidación sobre el endotelio de las arterias y sobre la mitocondria, que es el órgano que permite la respiración de las células”, detalló Barnoya.
La investigación destacó, además, la importancia de que los países ratifiquen el Convenio Marco para el Control del Tabaco, que entró en vigor el 25 de febrero de 2005 y cuenta con 172 Estados adheridos.
Con esta iniciativa, impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), varias naciones han logrado reducir la contaminación aérea de los ambientes cerrados, señalaron expertos que participan de la reunión internacional.
“Uruguay -por ejemplo- es uno de los países del mundo que tiene una mejor calidad del aire en sus ambientes cerrados”, destacó Eduardo Bianco, director del Programa de Control del Tabaco de la Fundación Interamericana del Corazón y presidente del Centro de Investigación de la Epidemia de Tabaquismo en Uruguay.
“Las nuevas evidencias ayudan a comprender la disminución rápida de la enfermedad cardiaca después de la implementación de ambientes libres de humo de tabaco. En Italia y California (EE.UU.), que incorporaron estos ámbitos, se ha visto que la mortalidad e incidencia de infartos del corazón disminuye rápidamente”, precisó Barnoya.
Incluso, estudios realizados en Italia y Estados Unidos mostraron que a los seis meses de prohibirse el fumar en ambientes cerrados hubo una reducción de entre el 11 y el 13 por ciento de los ingresos hospitalarios por infarto agudo de miocardio.
La OMS estimó que para 2025 las muertes asociadas al tabaco se habrán triplicado y el 70 por ciento ocurrirá en los países no desarrollados.
Sólo en los Estados Unidos mueren 35 mil personas cada año como resultado del humo que afecta cada vez más a los no fumadores, cuyo daño cardiovascular equivale a entre el 80 y el 90 por ciento del perjuicio que sufren los fumadores, señalaron los organizadores del congreso, del que participan expertos de unos 100 países.
2 comentarios:
Esta es otra de las consecuencias que padecemos los no fumadores, además de incrementar el riesgo de padecer alguna enfermedad cardiaca y también es un factor de riesgo en el desarrollo de la enfermedad del cáncer, enfisema pulmonar, asma, etc. Es mejor que tomemos nuestras precauciones antes de ser una víctima mortal del tabaco o de ser un fumador pasivo.
Great shar ethanks!
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