LONDRES (EFE).- Las mujeres pre-menopáusicas cuyas dietas tienen un alto contenido de fibra pueden reducir significativamente las posibilidades de contraer cáncer de mama, según se desprende de un estudio de la Universidad de Leeds, en Inglaterra.
Los investigadores del Centro de Epidemiología de Leeds hallaron que las mujeres que consumían 30 gramos de fibra por día reducían a la mitad el riesgo de cáncer de mama al compararlas con las que comían 20 gramos, según los resultados publicados en la revista International Journal of Epidemiology .
Los expertos siguieron de cerca los hábitos de alimentación de 35.000 mujeres durante siete años. Al inicio del estudio, las mujeres tenían entre 35 y 69 años, según explicaron los investigadores, que insistieron en la necesidad de aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra.
Unas 16.000 mujeres eran premenopáusicas, mientras que el resto ya había entrado en ese ciclo. Los expertos hallaron que 257 mujeres premenopáusicas desarrollaron cáncer de mama durante el estudio. Todas tenían una dieta rica en proteínas y consumían menos fibra y vitamina C que las mujeres que no desarrollaron cáncer.
No obstante, este efecto no se registró en el grupo de mujeres posmenopáusicas, de las que 350 desarrollaron cáncer de mama. Según los investigadores, eso pudo ocurrir porque la fibra afecta la forma en que el cuerpo procesa y regula el estrógeno.
Antes de la menopausia
Los niveles de esa hormona femenina son mayores en las mujeres premenopáusicas. "Nuestro estudio no encontró ningún efecto protector [de la fibra] en el grupo de más edad, pero hubo evidencia significativa de un vínculo en las mujeres premenopáusicas", dijo la profesora Jane Cade, autora principal del estudio.
La fibra tendría un mayor efecto en las mujeres durante la juventud, lo que explica la ausencia de protección en el grupo que ya había ingresado en la menopausia. La autora destacó la importancia de una alimentación rica en fibra, lo que se logra con el consumo de cereales, pan integral, pasta, frutas y verduras.
Para alcanzar los 30 gramos diarios, según los cálculos de los investigadores, una persona necesitaría desayunar con cereales de alto contenido de fibra, reemplazar el pan blanco por el pan integral, y consumir cinco porciones de frutas y de vegetales por día.
"Las mujeres posmenopáusicas -agregó Cade- con índices de masa corporal elevados tienen mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama. En ellas, el peso podría eliminar cualquier otro efecto beneficioso [de la alimentación], como ocurre con la fibra."
No hay comentarios.:
Publicar un comentario